El pasado miércoles 29 se inauguró una nueva versión de la Cátedra del Futuro, alianza de la Vicerrectoría de Investigación de la U. Mayor con la iniciativa transversal impulsada por la Comisión Desafíos del Futuro del Senado de la República, en conjunto con la Academia Chilena de Ciencias y el Gobierno de Chile.

La actividad contó con la presencia del senador Guido Girardi, quien destacó el rol de las instituciones de educación superior privadas en un contexto donde existe la necesidad de democratizar el conocimiento y la ciencia.

“Quienes tienen el conocimiento ante temas complejos es la universidad, por lo tanto, unir el pensamiento académico, la ciencia y la investigación a la toma de decisiones es fundamental”, sentenció el parlamentario.

Además, destacó que es relevante que las instituciones privadas tengan una misión pública, que les permita aportar al desarrollo del país, agregando que “la Universidad Mayor es un ejemplo de una universidad que quiere salir de sus aulas, quiere colaborar en las políticas públicas, en el desarrollo científico y quiere formar profesionales para que le sirvan a Chile”.

Por su parte, el Dr. Patricio Manque, Vicerrector de Investigación, resaltó este espacio como una oportunidad para que, desde las diferentes disciplinas congregadas en esta casa de estudios, se dé respuesta a una serie de problemáticas que serán de interés global y las cuales también repercutirán en el país en el mediano y largo plazo. Para la autoridad, Chile tiene muchos desafíos y es importante ir construyendo políticas de Estado, donde las universidades aporten.

Cómo afecta el desempleo a la salud

La jornada tuvo como principal conferencista al Dr. Esteban Calvo, Director del Centro de Investigación en Sociedad y Salud (CIIS) y especialista en sociología del curso de vida, epidemiología social, envejecimiento y políticas públicas comparadas, quien explicó a los asistentes cómo afecta el desempleo a la salud emocional y física de las personas.

Según el académico, en las próximas dos décadas entre el 30% y 70% de las ocupaciones deberían desaparecer, producto de la incorporación de la inteligencia artificial y las nuevas tecnologías. No obstante, este cambio afectaría principalmente a las tareas más rutinarias, donde se desempeñan las personas más vulnerables.

De acuerdo con el experto, hay estudios que indican que los trabajos complejos están asociados a mejores trayectorias cognitivas, lo que es importante si se considera que la población mundial está envejeciendo y las enfermedades como el Alzheimer y la demencia están aumentando.

Asimismo, remarcó que uno de los principales problemas que repercute en la salud mental y física de las personas ante el desempleo es el estrés, el cual no solo afecta a quien perdió su fuente laboral, sino que también a su entorno.

“Hay modelos que dicen que el estrés en la infancia no afecta nuestra biología en la vejez, sino que es el estrés en la adultez el que hace que tengamos un impacto en la vejez, por lo que podríamos hacer políticas públicas que quiebren esta cadena causal en todo momento de la vida”, afirmó el investigador.

De este modo, el Dr. Calvo planteó la necesidad de promover y desarrollar políticas públicas que protejan la salud de las personas ante un contexto desfavorable, como lo es estar desempleado.